E
n el marco de un importante paquete de medidas económicas anunciadas el domingo pasado por el ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa, que busca mitigar el impacto de la última devaluación y la suba generalizada de precios, se confirmó que las cuotas de la medicina prepaga serán congeladas por tres meses, dejando de lado el sistema de incremento vigente. La medida se completa con el acuerdo de precios de medicamentos, que estarán por debajo de la inflación hasta fines de octubre, algo que se acordó con los laboratorios productores hace unos días. La reacción de las firmas de salud no fue la mejor, que criticaron su puesta en marcha. Es más, versiones periodísticas indican que además de expresar su enojo, irían a la justicia para tratar de frenar la medida. Para setiembre, el incremento de las cuotas de la salud privada acordado era del 7,18 por ciento con respecto al valor del Plan de Servicio vigente al 31 de este mes. Los empresarios, en una jornada intensa, analizan hasta la posibilidad de ir a la Justicia para sostener el esquema actual. “Hemos decidido suspender el aumento de la medicina prepaga por lo próximos 90 días para todos aquellos hogares que no superen el ingreso de los 2 millones de pesos. A los efectos de que el esfuerzo que hacen trabajadores y Estado también venga acompañado por una atención de salud que no castiguen las cuentas del trabajador”, detalló el ministro durante el anuncio.
El domingo por la noche el ministro Sergio Massa anunció que el aumento de la medicina prepaga se suspenderá durante los próximos 90 días para las familias con ingresos que no superen los 2 millones de pesos mensuales. Desde las prepagas afirman que la decisión del Gobierno es “discriminatoria” porque en ningún sector de la economía hay congelamiento de precios. Mencionan, a modo de ejemplo, que a los combustibles se les fijó que no subirían más hasta el 31 de octubre después de que incrementaran 12,5 por ciento o que a los alimentos se les admite un alza del 5 por ciento mensual. Si la suba de setiembre se hubiera llevado adelante, en los primeros nueve meses del año las cuotas hubieran acumulado un alza de 78,1 por ciento (63,8 por ciento para aquellos que se hubieran registrado como de menos poder adquisitivo). Ese era el acuerdo al que llegaron las partes. La decisión del Gobierno llega en un contexto muy complejo para el sistema de salud, en el que las empresas prestadoras vienen alertando por el desabastecimiento y la suba de precios de insumos médicos.
El Gobierno de la Nación Argentina informó este domingo que se aplicará un congelamiento del precio de varios productos, como medicamentos además de las prepagas. “Venimos llevando adelante un programa que de acuerdos de precios que esta semana se firma en cada uno de los rubros: cero aumentos de combustibles hasta el primero de noviembre, cero aumento de medicamentos hasta el primero de noviembre, y un sendero del 5 por ciento con más de 425 empresas que representan 53 mil productos de higiene, alimento, y de primera necesidad de la canasta de los argentinos”, anunció Massa, a través de un video en publicado en su cuenta de Twitter. En este contexto, Claudia Martino, secretaria general de la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), remarcó que “las farmacias no somos los formadores de precios, sino la industria farmacéutica, cada uno de los laboratorios. Nosotros nos enteramos por un comunicado, se juntó la industria farmacéutica con la Secretaría de Comercio”, explicó en primera línea. En tanto, manifestó: "En el congelamiento, normalmente, el medicamento venía acompañando el ritmo de la inflación. Con la devaluación se negoció rápidamente con PAMI y se tomaron medidas para que la provisión del programa esté asegurada". "Afecta el stock de farmacia, estamos peleándola como cualquier otro sector. Lo que nos complica es que algunas prepagas u obras sociales se extienden demasiado en el reintegro del pago, entonces puede pasar que el stock de la farmacia esté resentido”, agregó la secretaria general de la Confederación Farmacéutica Argentina.